¿Duermes cada vez menos? El culpable podría ser el cambio climático

Cuando se ha analizado el impacto del cambio climático en la vida humana, la mayoría de los investigadores han desarrollado estudios en los que se centran en cómo estos eventos climáticos extremos afectan los resultados de la economía y la salud social a gran escala.

Marcando una gran diferencia investigativa, expertos de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, señalan que el cambio climático también puede influenciar una actividad diaria humana fundamental: dormir.

Quizá suena un poco extraño, pero el equipo detalla que el aumento de la temperatura ambiente afecta negativamente la cantidad de sueño anual de las personas, además de aspectos conductuales, psicológicos y fisiológicos esenciales para el bienestar.

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“Nuestros resultados indican que el sueño, un proceso de restauración esencial integral para la salud y la productividad humana, puede verse degradado por temperaturas más cálidas”, explica Kelton Minor, autor principal del estudio.

Más temperatura, ¿menos horas de sueño?

Para llegar a esta hipótesis, el equipo utilizó siete millones de registros de sueño nocturno de más de 47 mil adultos en 68 países de todos los continentes.

Estos datos de sueño globales anónimos fueron recopilados por pulseras de seguimiento del sueño.

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El estudio indica que durante noches más cálidas –sobre 30 °C-, el sueño disminuye en promedio unos 14 minutos.

Esto significa que la probabilidad de dormir menos de siete horas también aumenta a medida que aumentan las temperaturas.

“Nuestros cuerpos están altamente adaptados para mantener una temperatura corporal central estable, algo de lo que dependen nuestras vidas”, agregó.

Los datos fueron presentados en el estudio titulado “El aumento de las temperaturas erosiona el sueño humano a nivel mundial”, que fue publicado en la revista One Earth.