Estudios han detallado que beber té impulsa la creatividad y la capacidad intelectual, mientras que otras investigaciones han apuntado a que el consumo excesivo de café aumentaría el riesgo de padecer demencia.

Encontrando un punto medio, investigadores de la Universidad Médica de Tianjin, China, se pospusieron estudiar el beneficio de beber café o té durante la mañana en 365.682 participantes del Biobanco del Reino Unido, quienes fueron reclutados entre 2006 y 2010, y seguidos hasta 2020.

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Durante el período de estudio, 5.079 desarrollaron demencia y 10.053 experimentaron al menos un accidente cerebrovascular.

Según informan en su estudio, publicado en PLOS Med, las personas que beben entre 2-3 tazas de café o 3.5 tazas de té al día -o una combinación de 4-6 tazas de té y café- presentaron una incidencia más baja de accidentes cerebrovasculares o demencia.

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Quienes bebieron 2-3 tazas de café y 2-3 tras de té en la mañana, tienen un riesgo menor de 32% de padecer una accidente cerebrovascular y un 28% menos de demencia.

Si bien el consumo de estas bebidas puede brindar una protección contra estas enfermedades, el equipo advierte que debe ser siempre moderado.

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