Científicos del Instituto de Ciencias Weizmann, Israel, se han dedicado los últimos años a investigar una particular sustancia química capaz de inducir cierta respuesta en el comportamiento en las personas.
El equipo descubrió en 2015 que la sustancia hexadecimal (HEX) juega un importante rol en el comportamiento de los roedores, ya que reduce las respuesta de estrés mediante el proceso de amortiguación social.
Como una forma de conocer si HEX induce a la agresión entre hombres y mujeres, el equipo analizó a 200 voluntarios que participaron en dos experimentos conductuales diferentes.
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“Descubrimos que HEX no tiene olor perceptible, pero que cuando lo olfateas, afecta la forma en que te comportas con los demás, específicamente, tus respuestas agresivas a los demás”, detalló Eva Mishor, la investigadora principal del proyecto.
El equipo detalla que HEX no afectó la respuesta de agresión, pero sí observaron un aumento en la agresión en las mujeres. Las mediciones de actividad cerebral mediante imágenes de resonancia magnética (fMRI) arrojaron que tanto en hombres como mujeres, este químico aumenta la actividad en el giro angular izquierdo, pero su conectividad es diferente.
“El HEX, al parecer, afecta a los hombres en el sentido de que había más regulación social, su agresión se mantuvo bajo control y sirvió como una señal ‘fría’ para ellos, mientras que en las mujeres la regulación disminuyó y se puede pensar en ella como una señal «liberada»”, agregaron en un comunicado.
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Una segunda parte del estudio analizó este compuesto en los bebés, descubriendo que el HEX es mucho más abundante en el cuero cabelludo de los recién nacidos, sin embargo, explican en el estudio que aún no pueden vincular este fenómeno, pero especulan que HEX podría ser una importante herramienta de señalización química desde un bebé hasta sus padres.
“Los bebés no pueden comunicarse a través del lenguaje, por lo que la comunicación química es muy importante para ellos. Como bebé, te interesa hacer que tu madre sea más agresiva y reducir la agresividad en tu padre”, señaló Mishor.
El estudio completo fue publicado en Science Advances.
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